La reciente caída de Amazon Web Services (AWS) volvió a recordarnos algo incómodo: gran parte de internet está colgada de un mismo gancho. Cuando ese gancho se rompe —o incluso si solo se tuerce— el efecto dominó se siente en todo el ecosistema: bancos, apps de entrega, juegos, comercios electrónicos, medios de pago y más. En Colombia lo vivimos de cerca con intermitencias y paradas en plataformas de alto uso.
Este artículo no va “a la crónica del susto”, sino a lo importante: cómo reducir la dependencia de un solo proveedor/una sola región y qué pasos concretos puedes aplicar desde hoy para mejorar la resiliencia de tu negocio.
Qué pasó y por qué afectó a medio internet (y a Colombia)
- El incidente mostró que centralizar servicios críticos (autenticación, bases de datos, colas, DNS) en un mismo lugar genera fallos sincronizados.
- Muchas empresas dependen de una región con mucho peso operativo (como US-EAST-1). Si esa región tropieza, “se caen” piezas que otros dan por sentadas.
- En Colombia, el impacto fue visible: apps bancarias y de pagos tuvieron intermitencias y cortes, deteniendo operaciones cotidianas en horarios clave.
Idea clave: el problema no es “una app”, es el punto único de fallo. Si tu arquitectura se concentra en un solo sitio, el riesgo se multiplica.

La región estrella (y el efecto dominó)
A menudo una única región concentra catálogos, metadatos y componentes compartidos por muchos servicios. Cuando su capacidad se degrada, las latencias se disparan, se acumulan colas, aparecen timeouts y la recuperación tarda más de lo que dice el primer “ya estamos estables”. Por eso algunas plataformas se “levantan” en horas, pero arrastran backlogs y reprocesos que tardan en normalizarse.
El verdadero problema: centralización y monocultivo tecnológico
- Una sola región: simplifica despliegues, pero tu RTO/RPO queda atado a un datacenter.
- Un solo proveedor: te ordena la factura, pero te quita capacidad de maniobra cuando hay incidentes.
- Acoplamiento fuerte: si todo vive junto (login, pagos, base de datos), cuando falla, falla todo.
La lección es clara: diversificar. No se trata de “migrar todo mañana”, sino de diseñar para fallar y limitar el radio del impacto.
Te puede interesar: Cómo mezclar música con YouTube
9 estrategias de resiliencia que puedes aplicar desde hoy
1) Multirregión y redundancia zonal
- Activa Multi-AZ en bases de datos y cachés.
- Define una región secundaria con replicación y failover automático.
- Practica game days (simulacros) para medir conmutación real.
2) DNS resiliente (el timón del tráfico)
- Usa TTL cortos en registros críticos.
- Aplica health checks de capa aplicación.
- Considera un proveedor DNS secundario para dominios vitales.
3) Caching inteligente para sobrevivir picos y cortes
- CDN + caché de borde para estáticos y respuestas idempotentes.
- Gracia de expiración para operar en “modo isla” por minutos.
- Cachea catálogos y configuraciones; deja no cacheable lo estrictamente transaccional.
4) Circuit breakers y bulkheads
- Si un backend se degrada, abre el circuito y devuelve una respuesta degradada útil.
- Aísla dominios de fallo (pagos, búsqueda, perfil) para evitar el efecto arrastre.
Te puede interesar: Battlefield 6 vs Battlefield 2042: ¿qué mejora realmente?
5) Feature flags y graceful degradation
- Apaga funciones no críticas sin redeploy.
- Ten modos de solo lectura o “servicio limitado” para mantener operativo lo esencial.
6) Datos con propósito: RTO/RPO cumplibles
- Define RTO (tiempo de recuperación) y RPO (pérdida admisible) por servicio.
- Replica de forma consistente y verifica integridad periódicamente (no asumas).
7) Observabilidad que sirva en crisis
- Métricas por dependencia (latencia, errores) y trazabilidad de extremo a extremo.
- Alertas basadas en SLOs y presupuestos de error.
- Runbooks visibles desde los dashboards (qué hacer, a quién escalar).
8) Comunicación y status page independiente
- Página de estado fuera del proveedor principal.
- Actualizaciones cada 15–30 min: qué falla, qué funciona, próxima actualización y acciones sugeridas.
- Plantillas listas para soporte y redes.
9) Evaluación de riesgo proveedor (y salida de emergencia)
- Lista de servicios administrados críticos (DB, colas, IA, correos, notificaciones).
- Alternativa por servicio (otra región/proveedor) y procedimiento de migración documentado.
Qué hacer si eres Pyme o startup sin equipo de SRE
- Prioriza por impacto: identifica 3 flujos que más duelen si paran 30–60 min (p. ej., pagos, login, checkout).
- Stack mínimo viable de resiliencia:
- CDN + caché (estáticos y ciertas APIs).
- DNS con health checks + región secundaria básica.
- Logs centralizados + alertas por SLO.
- Terceros con contrato: monitoreo sintético, gestión de incidentes y status page.
- Números sobre la mesa: calcula costo de downtime/hora y compáralo con el costo de la redundancia. Un solo apagón grande suele pagar varias mejoras.

Roadmap 30/60/90 días para reducir dependencia
Día 0–30
- Mapear dependencias por servicio y fijar RTO/RPO.
- Activar Multi-AZ en DB/caché y TTL cortos en DNS.
- Montar status page independiente y plantillas de comunicación.
Día 31–60
- Desplegar región secundaria con replicación de datos críticos.
- Implementar feature flags y circuit breakers en 2–3 rutas clave.
- Primer game day: corta una dependencia y mide tiempos reales.
Día 61–90
- Extender multirregión a autenticación/colas.
- Afinar SLOs y automatizar failover.
- Documentar runbooks y entrenar a soporte y marketing para crisis.
Conclusiones: la resiliencia como ventaja competitiva
La caída de Amazon dejó al descubierto lo frágil que puede ser depender de un solo punto. Las empresas que convierten la resiliencia en músculo operativo no solo sobreviven mejor: ganan confianza y ventas cuando el resto patina. No necesitas un ejército SRE para empezar; necesitas un plan, foco en lo crítico y disciplina para practicarlo.
FAQs
¿Por qué siempre se menciona la misma región cuando hay incidentes grandes?
Porque allí suelen concentrarse servicios y metadatos que muchos productos usan. Si se degrada, el efecto se propaga con rapidez.
¿Multi-cloud o multirregión?
Para la mayoría, multirregión bien ejecutado ofrece la mayor parte del beneficio con menos complejidad. Multi-cloud aplica cuando hay requisitos regulatorios o de latencia muy específicos.
¿Cómo debo comunicar durante un outage?
Con una status page independiente, mensajes breves cada 15–30 minutos, explicando qué se degradó, qué sigue funcionando, la próxima actualización y recomendaciones claras para el usuario.



